Si hay un trabajo del cual me sienta verdaderamente orgulloso en el ciclo que pasó es el que hice encarnando a Don Zócimo Lucas para el curso de Integración 4 .
El trabajo se denominó " Moda y Significado", y las bases que nos habían dado los profesores eran las siguientes : A partir de la exploración en un espacio , se elaborará un concepto que deberá comunicar el objeto construido en forma de ropaje.
Datos básicos para mi trabajo
Don Zócimo Lucas es un señor que vende desde hace mas de 40 años golosinas , caramelos y panes con pollo en la Universidad Católica ( universidad en la cual estudio) . Comenzó haciéndolo en el frontis de la Facultad de Ciencias Sociales con una pequeña carretilla de madera en donde transportaba sus productos . Irónicamente, fue cambiado a la parte de atrás de dicha facultad para permanecer vendiendo dentro de un kiosko de fierro . Es en este minúsculo espacio, escondido de las zonas mas concurridas, donde este símbolo de la universidad pasa la mayor parte de su tiempo . Mientras tanto, no muy lejos de la caseta de Don Zócimo, en una rotonda que alguna vez sirvió como espacio de memoria para alumnos héroes de esta casa de estudios durante la época del terrorismo, las autoridades de la PUCP ( Pontificia Universidad Católica ) decidieron otorgar una hermosa cafetería a la empresa Cafetal . Uno no puede quejarse, la calidad de los productos que Cafetal ofrece es óptima. Si quieres comer como dios manda date una vuelta por ahí .
Sin embargo, no todo es perfecto.
Los precios de los deliciosos sanguches de Cafetal son altísimos y casi impagables para el promedio normal de la mayoría de alumnos. Por el contrario, Don Zócimo vende humildemente en su kiosquito suculentos sanguchitos de pollo a solo S/.1. 20 .
Entonces me pregunté si no sería una buena idea intervenir la entrada de Cafetal con un traje que representara a Don Zócimo y sus bendítos panes con pollo. Todo esto con la intención de ver hacia que lado de la balanza se inclinaría la decisión y la reacción de la gente a la hora de tener que llenar su estomaguito y pagar por su bitute. Además , claro está , de un merecidísimo y espontáneo homenaje al gran servicio que Don Zócimo siempre nos brinda.
Para esto, lo que decidí hacer fue crear un traje basado en Don Zócimo Lucas y en aquel habitat tan particular que lo rodea ( su kiosko) y de cierta manera parece formar parte de su propio espacio natural.
Aquí les dejo algunas imágenes del video que filmé sobre el trabajo gracias a la gentil colaboración de mi gran amigo Sergio Dapello . Cabe recalcar que el recorrido de esta representación de Don Zócimo se inició justamente en el mismísimo kiosko del señor. Desde ahí fuimos directamente en Vía Crúcis a Cafetal , y nada , mire usted lo que pasó ....
El verdadero y único Don Zócimo
2 comentarios:
se ve excelente. qué pena que no pude verlo en persona.
ya me provocó un sanguchito de pollo.
que mate de risaaa asi que si exisita don zocimo jajajaajaj cada vez mas genial dante pero tambien mas loco para variar.
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