jueves, 19 de febrero de 2009

Roger Hodgson en Lima


Sí pues, logré ir...


Sólo un amigo de la talla de mi hermano Sergio Dapello, es capaz de regalarme una entrada de 311 soles para asistir a un concierto como el que ayer ofreció Roger Hodgson en Lima. Te estoy eternamente agradecido puto, porque lo que vimos ayer junto a mi primaso Rodrigo fue realmente de la san puta.

Integrante fundamental de la gran banda inglesa Supertramp, Hodgson es en mi opinión uno de los mas brillantes compositores que jamás ha dado el rock and roll. Un tipo muy versátil, de notable capacidad musical, capaz de hacer magia hasta el día de hoy con la sola presencia de su bellísima voz, sus teclados saltarines y la siempre fiel guitarrita acústica. Roger Hodgson es, a mi parecer, un tipo muy sentimental y delicado que ha logrado construir durante toda su carrera cantidad de canciones tan inmensamente cercanas a todos, que por eso se han convertido en verdaderos himnos.

Yo soy bien hincha de Supertramp, y a pesar de que no los he mencionado mucho, creo que fácilmente estan dentro de mis 10 bandas favoritas. Es de esos grupos que nunca termina de aburrirme, por la gran variedad de matices que se puede encontrar en su propuesta. La cual va del pop rock al progresivo más sinfónico con toques de jazz. Una agrupación básica de los 70s que tuvo como sus pilares a dos verdaderos capos : Rick Davies y el citado Roger Hodgson.


Supervagabundos. Referentes absolutos del rock setentero



El concierto comenzó alrededor de las 10 de la noche y duró por lo menos una hora y media. Tiempo preciso y suficiente para que Hodgson nos regalara una seguidilla de clásicos que todos estuvimos esperando, y muy seguramente jamás soñamos con presenciar. Para empezar "Take the long way home", un verdadero poema a los retornos, una mirada confesional y valiente de los caminos que debemos tomar una vez en la vida. Como diciendote a tí mismo después de un periplo prolongado " Y bien, ha sido mucho por hoy, ¿haré honor a lo vivido ahorrándome el último gasto ? Nicagando compadrito, por eso toma el camino largo a casa". Luego vendrían gemas clásicas como la conocidísima "Breakfast in America" ( del disco homónimo, el más vendido en la historia de Supertramp), "Hide in your shell" con su dulzura triste y "Dreamer" ( del primer gran trabajo de la banda, el mas que soberbio Crime Of The Century), "The logical song", "Give a little bit", "Lord is it mine", algunas otros que no conocía ( asumo que de su etapa solista), y lo más anhelado por mí desde el fondo de mi alma, algunos pasajes del que hoy por hoy es mi disco favorito de la banda, el Crisis? What Crisis?. Con bellezas inmesurables como " A soapbox opera" y la seguidilla que da orígen al álbum : "Easy does it" ( con los silbiditos incluídos ) y "Sister Moonshine". Verdaderamente inolvidable.
Hay que resaltar además que la actitud de Hodgson para con el público fue más que bondadosa. No he visto en lo que va de mi corta experiencia como espectador de conciertos internacionales, a un artista tan buena onda y paciente con el público peruano. Jugó bromas a la gente y también dejó que se las jueguen. Digamos que al ex vocalista de Supertramp solo le faltó la bola roja en la ñata para ser la reencarnación musical ( y física) del curita Gonzalete de Pataclaun. Un pancito de dios el inglés, quién demostrando que no todos los rockeros de la old school se pudren en oro como Elton John, salió a escena vestido en un franciscano ( por no decir misiaso) atuendito blanco, compuesto de un camisón extra large que se lo comía en talla y su conjuntito de zapatos y lonpa del mismo color, que parecía haberlo pedido prestado a algun dentista dadivoso de la avenida Aviación.
El tipo irradiaba una paz inmensa adquirida por su travesía a lo largo del tiempo. Y esto se vió reflejado en la naturalidad con la que desempolvó sus viejos temas. "Amo a todas estas canciones ya que todas ellas me acompañaron en mi paso por este mundo" - Afirmó en un momento.
Siguió deleitándonos con "School", aquella alucinante y mordaz reflexión sobre lo que es la etapa en el colegio. Demostró su lado más técnico con "Fools Overture", y tuvo a bien cerrar la presentación con esa bonita cancioncilla llamada "It's raining again", para que todos acabáramos parándonos de nuestras butacas a aplaudir.
Justo y preciso. Natural. Roger Hodgson nos ofreció el pasado miércoles 18 de febrero, una excelente demostración de música y simpleza que jamás cayó en los típicos arrebatos de protagonismo que a veces suelen tener los artistas de sienes plateadas. Supertramp nunca fue una banda escandalosa, y a Hodgson difícilmente lo vamos a encontrar alguna vez en las primeras planas de un semanario de espectáculos. El tipo hace lo que mas ama con mucho amor y regalándonos aún más amor. ¿ Hay manera de resistir a algo tan verdadero y tangible? Im-po-sible.

1 comentario:

Anónimo dijo...

De nada amigo. Cabe mencionar que The Logical Song fue absolutamente superior a la versión que está en el Breakfast In America, fue una presentación verdaderamente soberbia de ese tema.
Te olvidaste de mencionar el tema que dedicó al pequeño Alfie de trece años: "Lord Is It Mine"