miércoles, 11 de agosto de 2010

El amor en los tiempos del Messenger

aquí y ahora



El Messenger, esa tan usada -y querida por muchos- arma de comunicación, ha dejado de generarle placer a mi amigo Iscariote. Me lo contó esta mañana mientras comíamos un sanguche de cabeza en El Parque Industrial.

"Estamos en un tiempo en que las adicciones se han vuelto asolapadas"-sostenía, "y ya muchos no se dan cuenta de que estan enganchados enfermizamente a algo, sólo porque socialmente no está mal visto. Eso esta pasando con el Messenger." Me contaba esto, preocupado, porque últimamente sentía que comunicarse con su enamorada -quien se halla vacacionando en el Brasil- era mediante el chat, una cosa de locos. "Uno, Dante, cuando entra al Messenger y conversa con un ser querido, siente de inmediato que lo que escribe puede ser malentendido, y que incluso hay una urgencia en el que está al otro lado de la línea, que de no ser correspondida puede acabar avivando el fuego de una inminente discusión. Ahí uno se pregunta, confundido ante la supremacia de la versión que el Messenger da de nosotros, ¿Pero acaso esta persona no me conoce de verdad?"

Iscariote tiene razón, a mí también me ha pasado eso algunas veces. Y es curioso, ya que a pesar de que al igual que él he llegado a detestar en innumerables ocasiones este tipo de medios de comunicación, sigo sin embargo usandolos como si nada.

Continuaba Iscariote diciéndome "Pucha hermano, yo por eso ya ni uso celular. Antes, en el tiempo de las cartas, la gente era más paciente, no tenían problemas en esperar más de 2 días para recibir una novedad. Ahora esperamos con los dientes afilados una respuesta al instante, una señal de vida cada 15 segundos, un motivo que justifique el no hacer acto de presencia.... Yo me pregunto Dantecito querido, ¿Dónde quedó nuestro preciado derecho al mutis, a la ausencia?"

Era cierto pues, ¡Ahora hasta existe el botón de zumbido!

Entiendo bien a Iscariote. Al igual que él me gusta desaparecerme a veces y no hay cosa que más aprecie que el contacto directo con la persona amada, así como en la misma medida no llega a satisfacerme del todo la comunicación a distancia.

Me contó que ayer su chica, en comunicación nocturna desde Río Branco le había dejado de hablar al 'no sentir' que estaba interesado en hacer de aquella brevísima oportunidad que tenían de comunicarse en la lejanía, un simpático momento en común de gustos cibercompartidos y temas ciberpajas para conversar. Sinceramente quedé extrañado, ya que si algo caracteriza a mi amigo Iscariote es su inagotable creatividad a la hora de la palabra ¡Cómo le podía decir Salomé (su novia) que padece de desinterés para el chat!

"Mira Flaco, yo a mi Salomecita la quiero como mierda y no la quisiera perder por nada del mundo, pero pucha, nuestras maneras de abordar el amor son bien distintas. Ella tiene una energía admirable y un desprendimiento para amar que yo admiro, pero en mi caso, hay días en los que no tengo ganas de ser muy cariñoso, muy atento, y eso puede traducirse en mis pocas ganas de hacer algo divertido. Si a eso le añades -ahora que Salomé y yo estamos lejos- la diferencia de habitos, de horarios y de planes... ¡todavía vía internet! pues, es muy difícil llegar a coincidir en el disfrute. Además, seamos sinceros loco, esto de la Internet es una cagada, cuando tu abres una ventana abres también otra, empiezas a chequear páginas que te interesan, ver el Facebook simultáneamente, a bajar música. Es inevitable. Y luego acabas, mareado, tenso y exigido si es que tu amor te dice ¿hey que estas haciendo?, y ... como las mujeres son locas, esa urgencia por tu respuesta que no llega al toque, puede desembocar, incluso, en una duda que inmediatamente puede ser asociada a la fácil y engañosa sospecha de que estás hablando con otra mujer, o qué se yo. Por eso yo te digo una cosa Dante, he llegado a la sana conclusión de que el Messenger está perfecto para hablar con los patas (que, dicho sea de paso, nunca te van a llamar la atención porque te tardes para responderles) y meter joda, pero, por el bien de mi relación con mi Salomecita... caballeros nomás, un mail cada vez que realmente ande con ganas de contarle alguna buena nueva y expresarle con más elocuencia de la habitual, el gran amor que le tengo. Así hacían mis abuelos cuando estaban lejos. Una carta valía más que 100 mensajes de texto de hoy en día. Y era bien idiota dudar del cariño que se profesaban, de eso, mi compadre, estaban ¡recoooooooooooooooooontra seguros!"

Fue de verdad una conversación memorable la de esta mañana con Iscariote. De más está decir que sirvió para hacer mucho más agradable nuestra atragantada con los sanguchasos. Pues es verdad, ahora que lo pienso.... estos tiempos cibernéticos, con sus artilugios, estan haciendo que perdamos seguridad como pareja. Acrecentan la desconfianza y por ende, mandan al tacho la normal tranquilidad que deberíamos tener.

¡Uy! justo me acabo de acordar que no hablo con Daggiana hace unos días. He estado gozando de mi pereza arequipeña a tiempo completo, y ni dudar que ella me comprende. A ver si esta noche, desde la cabina telefónica de la Plaza De Armas, le propongo seguir estos sabios consejos que sin querer me ha dado mi amigo Iscariote.




lunes, 9 de agosto de 2010

LA VERDAD DESNUDA : Me sigo cagando (de vanidad y de miedo)

the shame
A veces me pregunto para qué chupo si siempre termino cagándola. El trago no es malo, eso podrán replicar ustedes los alcohólicos. Pues bien, yo no soy alcohólico... pero definitivamente lo que no me ha dado jamás las drogas, me lo ha brindado con creces el alcohol. Desprestigio, escapismo, irreverencia y altas dosis de humor.
Hasta ahí muy bien, me dirán todos ustedes, chiquilines de la chapa y el secoya. Hasta ahí todo bien, concuerdo efectivamente. Pero saben que pasa. ¿¿¿¿¿Qué paaaaaaaaaaaaasa????? Que se me ha olvidado en los vasos de alcohol, la ingenuidad del buen amigo, la voluntad buena del hombre voluntarioso, e incluso, mis señores, la más jocosa replica del juglar que siempre a mucha honra fui... pues hoy se me ha quedado toditita enlodada.
He pasado de ser un loco lindo a un penoso atormentado de mierda. A un psicópata enfermito e infeliz. Sí, sí, tal cual como el idiota que haces unos meses critiqué a más no poder en un articulillo de esta mi despensa rosada, por haberse tirado encima de la batería que yo tocaba macanudo en senda reunión artie party.
¿Ves? qué te parece gentil lector, te juraría que a comparación de ese extraviado skamúsico de barba adolescente, he quedado yo este fín de semana como, no sé, la versión más llorona de Tula Rodriguez indignada, o que sé yo... como el palabrero más paupérrimo y exprimible de tanta pena, de tanta pena que da la mazamorra de sus actos.
Sí pues, no te dejes engañar compadre, el Dante amigo que le encanta darte besos y decirte que tu has marcado época en sus recuerdos con tu fabulosa amistad... ese mismo Dante que con 68 o más vasos de menjunjes tóxicos te podía conmover fácilmente con sus alocadas pero bonachonas confesiones de afecto, ese mismo ahora, muy fácilmente puede faltar a la verdad, decirte que te quiere y te ama cuando en realidad bien fácilmente hace una hora podía envidiarte en silencio, hablar pestecitas de tí a tus espaldas o sencillamente ignorarte. Ahí tienes el menú, hay diversas opciones para escoger. Te lo pongo sobre la mesa, es cortesía de la casa. No le creas, ojo, a este bárbaro amante de los Rolling Stones cuando te habla en pro de su moral o se eriza si es que alguien pone en tela de juicio aquel valor por el que siempre creyó haber luchado. La honestidad.
La honestidad en el fundador de este blog, hoy en día puede irse al carajo sí es que realizó una mala combinación de licores, y más aún si es que me hallo de visita en mi amada Ciudad Blanca. La ciudad que para mí más parece ahora, la caldera añeja de la que año a año renuevo mis más odiosos temores.
Yo no he desterrado aún, yo no he dejado de mirar aún a ciertos pasajes de mi inicial trayecto que, sin duda, sí que todavía pueden ejercer una pandemia general en mí. Mi vanidad se transformará en ira muy seguramente si es que siento que tú no me admiras, o me miras, o me hablas con buena cara. Sí compadre, la verdad que si tu no correspondes mi piropo.. puede que saque del cajoncito mi disfraz de 'gallito macho' y te haga 'el pare' pégandote un manazo en los huevos. En los testes. Con toooooooodas las de la ley para ser tildado además de enfermo, como rosquete. Y claro, como estoy tan tieso, tan extraordinariamente irrompible en mi ilusión fatídica y caricaturizante, seguramente te insultaré más, te pediré que vengas y me pegues si algo te molesta de mí, supuestamente con heroismo te gritaré (a ti y a todos) que a mí nadie me toca, que eres un tonto al subvalorarme, al dejar a un lado y querer hacerte el rico con este huevón que si quisiera ahorita podría estar firmándole un autógrafo a tu menor hijo. Y con ese mismo caos hastalashuevas, ahora sí sintiéndome imbatible, armado astaloshuesos de garbo y glamour de rockandroller, iré de mesa en mesa roceando cerveza a los más grandes de la escuela. Aquellos que nunca supieron quien fui, y que ahora me veran la cara por primera vez y tendran (quieran o no) que sublevarse ante mis parámetros. Que acá las reglas las pongo yo. El verdadero y único principe que desde Mariano Melgar ha podido parir estar tierra. Lo siento en las venas, flaco. Se de lo que hablo, no estoy loco, no exagero al pedirte que desocupes mi trono.
Ya huevón. Ellos, los nuevos arequipeños, los manganzones de la Mahatma 2000, o de la Ad Libitum 4500 no tolerarán nicagando mi maniobrita estúpida y apenas sintiendose salpicados, se pararán de sus asientos para decirme mi vida.
Como ves, yo estoy dándote el permiso broer para que me digas mi vida sin siquiera conocerme. Te la pongo recontra fácil. ¿No ves?.
Y claro, como suele pasar siempre, los dos ángeles que me cuidan (mis dos abuelas) mas los 3 angeles que tienen el desprendimiento de rescatarme siempre -como ya se ha vuelto costumbre- de este tipo de problemas (mis 3 mejores amigos), harán todo lo que este a su alcance para que no termine la noche en el cuarto de alguna clínica herido, o a lo mejor -bueno fuera- entre mis padres y algun efectivo de seguridad, queriendo balbucear entre mi inconciencia qué fue exactamente lo que me llevó a hacer tremendo desbarajuste.
He tomado ya excesivas cantidades de submarino (pisco con cerveza) para socapar mis más horribles miedos. Como ven, mi falta de tino es notoria para deducir las mejores salidas a mis peores traumas. ¿ Por qué tengo que caer siempre en la misma contradicción destructiva ? , ¿ Por qué tengo que pensar siempre más en la gente a la que no le importo un pito, que en la que de verdad me quiere y me tiene presente? (Viejitos, hermanos, amigos, Daggi... perdónenme).
Sabemos, hasta el hartazgo Dante... que en tu ciudad jamás fuiste un profeta. ¿Y..... es taaaaaaaaaaan necesario ser un profeta para sentirse bien?
Una resaca moral de años, es lo que tengo. Otra puta vacación en la que tendré que retornar con heridas del lugar que más amo. Luego de haberla pasado tan bien, caraaaaaaajo......Y pedir disculpas porque a toda costa me dí cuenta que hice todo astalperno.
PERDÓN RENATO, SÍ FUI UN HIPÓCRITA CONTIGO.

No me bañé en Bolivia

%%%%%%%%%%%



He viajado con mi familia

a La Paz - Bolivia

Yo sí quiero a mi familia

pero no me gusta viajar.


Prefiero mil veces antes

quedarme en casa

y hurgar en mi mundo

a nuevos sitios buscar.


Se que puedo sonar tonto

o más que nada egoísta

(todos dicen eso)


Yo la verdad

no niego ninguna de las anteriores

Y hasta añado mas :

Soy egoísta

Soy tonto

Soy irresponsable

Soy todo lo que chucha quieras

pero lo soy para mí.


Si tu gustas acompañarme en mi retiro

pues bienvenido

De puta madre por ti (y por mí)


Yo soy así

y creo que no siempre hay que pedir disculpas

Ni mucho menos

dar explicaciones.


El dolor persiste

sólo cuando es más grande que un momento

Mientras tanto

si haces doler una vez

¡No te preocupes!

¡No te irás al infierno!


Estaría siendo mezquino

eso sí

si pasara por alto los lindos lugares

que te ofrece conocer un viaje

Gratuitamente

y sin pedirte

Nada.


Eso sí

que es bien bonito

Pero ni por eso

yo hallaría a una ciudad nueva

superior a mi madriguera.


No pues

No es

lo mismo.


Te reitero y te repito

que como mis propios terrenos

hay bien poquitos

Así en ellos también pueda

sentirme extraño o loco

Me falta mi espacio.


Por eso a pesar de que

Bolivia es lindo

y su gente te acoge

y sus calles son gratas

y que hoy día en la tarde

haya rayado viendo El Valle De La Luna

y sepa ya mi estómago de comida bien rica

Por dentro mi alma

cuenta los días

para reencontrarme con mi cama.


Ah sí, me olvidaba

Dime flojo también.


Si pues

Es que yo he nacido para reposar

y no (en mis laureles)

Porque si los tuviera

quizas ya no me jodieran

por ser tan torpe

con los números.


En fín

Yo necesito una cama

para

descansar

oír música, complacerme

Y esa no la encuentro

haciendo tourismo.


Lindísima la ciudad

de La Paz, en verdad.


Inolvidable invalorable mi familia en verdad.


Pero a veces me jala

más

estar solo.


Y buscarme como ahora

estar afuera escribiendo esto

Mientras ellos toman un jugo

en una fina cafetería

del residencial barrio de San Miguel.


Habiendome negado

yo

a acompañarlos

porque dramatizaron

que no les haya dado el gusto

en un incidente de mierda

con un comentario que di.


Linda Bolivia, lindos mis viejos

simpático y favorable el viaje

pero

¿Qué puedo hacer si a veces

prefiero hacerme a un lado?


Me estoy aburriendo

y a lo mejor

quisiera no haber escrito

esto

Pero es mucho más sincero

que

coger mi maleta

sonreir para la foto

ser siempre un hijo bueno

tomarme el juguito con ellos

y callarme la boca.